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La Importancia de Escuchar a los Niños

manos de colores de niños

Si estás pensando en estudiar una profesión con salida laboral, no descartes el sector educativo. La formación profesional en Madrid en ITEP te ofrece muchas ventajas, además, podrás especializarte en Educación Infantil. Es un grado superior que incluye una materia específica para garantizar una cualificación de calidad. Entre algunas de las materias se tratan las técnicas de escucha activa, algo de gran relevancia en los niños. 

El psicólogo Carl Rogers ya trató la importancia de la escucha activa en 1950, por lo tanto, no es un término nuevo. No obstante, esta serie de conductas para tratar de forma respetuosa a los niños ha cobrado una epístola relevancia en los últimos tipos. Realmente, Thomas Gordon popularizó este método, que se trata más bien de una actitud. En cualquier caso, se trata de una técnica muy efectiva para fortalecer los lazos afectivos y desarrollar la empatía. Por este motivo, vamos a analizar este tema y conocer en qué consiste. 

Características de la escucha 

Como bien sabemos, oír no significa lo mismo que escuchar, por lo que, atendiendo la definición de la RAE, este término hace alusión a "prestar atención a lo que se oye". La escucha activa requiere de una serie de habilidades, que se pueden entrenar y desarrollar en las aulas, para lograr mejorar la comunicación de los niños. 

Esta forma respetuosa de tratar al niño es de gran importancia, porque se siente más valorado. Hoy en día, cuesta mucho concentrarse y atender a los mensajes, incluso, de los seres más importantes. Por este motivo, este tipo de comunicación es muy efectiva para mejorar las relaciones con el entorno más cercano. 

La escucha activa tiene una serie de características propias para conseguir captar la atención del interlocutor y mejorar la comunicación entre ambas partes. A continuación, se enumeran cuáles son y cómo intervienen en la relación. 

  • Empatía. Este aspecto es fundamental y es uno de los principales requisitos cuando escuchamos activamente. Esto implica mantener un grado de interés y la actitud correcta.  
  • Lenguaje corporal. Este tipo de lenguaje no verbal ofrece muchas señales sobre la actitud de la persona y si está receptiva a la comunicación. 
  • Contacto visual. Mirar a los ojos forma parte de la escucha activa, porque indica que nos importa la persona que envía el mensaje. 
  • Feedback. Se trata de validar una comunicación con palabra de refuerzo para hacer entender a la otra persona que está comprendiendo lo que dice. 
  • Evitar los juicios de valor. Este es otro de los factores claves en la escucha activa. Evitar juzgar para poder comprender mejor a la otra parte. 
  • Resumen. Finalmente, hacer un resumen de los expuesto es una forma de garantizar que se ha entendido un mensaje. 

En definitiva, este tipo de evidencia en las que interviene, tanto el lenguaje verbal como no verbal, ponen de manifiesto qué es la escucha activa. Por lo tanto, se puede poner a prueba una serie de capacidades cognitivas, el interés y la empatía para conseguir una buena comunicación. 

Tipos de escucha a los niños 

Hay varias formas de desarrollar la escucha activa del niño a través del juego. Los más pequeños podrán comprender el grado de importancia que tiene para mejorar la relación de la comunicación. Aquí entran en juego algunas enseñanzas y ciertas actitudes para que desarrollen estas habilidades.

Hay distintos tipos de escucha, además de la activa, tal como hemos desarrollado anteriormente. En este caso, se caracterizan por reunir una serie de particulares que las diferencia una de otras. 

  • Escucha apreciativa. Se refiere a cuando no se presta atención y se escucha por entretenimiento. 
  • Escucha selectiva. En este caso, la persona solo recibe la información que le interesa. 
  • Escucha discernida. Aquí solo se atiende al fondo de la conversación y se seleccionan los mensajes más importantes. 
  • Escucha analítica. Es una forma de comprender la relación entre las ideas para dar sentido al mensaje. 
  • Escucha sintetizada. Es la conversación se toma la iniciativa porque hay un interés para dirigir la comunicación. 
  • Escucha empática. Es un tipo de intervención en el que el receptor se pone en lugar del emisor para interpretar el mensaje. 

En conclusión, la escucha activa requiere de atención y capacidad de no juzgar a la otra parte. De esta manera, se podrá desarrollar un clima más favorable y con mayor empatía. Si estás interesado en inscribirte en un grado superior en Educación Infantil a distancia o presencial, ten en cuenta que se tratará este tema en profundidad. Hoy en día, manejar la comunicación correcta en el ámbito educativo tiene mucha importancia. 

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