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Causas de la Halitosis

Mujer comprobando su aliento

El mal aliento o la halitosis es muy frecuente en la mayoría de las personas y el origen principal se encuentra en la boca. Sin embargo, las que tienen algún problema respiratorio o digestivo, se ven mayormente afectadas. Si es persistente puede causar inseguridad, ansiedad y frustración, por lo tanto, es conveniente tratarlo.

Las causas de la halitosis pueden ser diversas, normalmente, el origen está en el consumo de ciertos alimentos o padecer alguna enfermedad. El cuidado personal y una buena higiene podrán ser suficientes para tratar este problema. Si no se resuelve, hay que consultar al dentista para buscar la mejor opción.

¿Qué es la halitosis?

Cuando nos referimos a la halitosis, lo más normal es pensar en el mal olor que desprende la boca. Se suele producir por la descomposición bacteriana de los restos de alimentos, sin embargo, hay otras causas que también intervienen. No debemos descartar que esto pueda afectar psicológicamente a algunas personas, lo que influye en la relación con la familia y amistades.

Si una persona tiene mal aliento, lo primero que tiene que hacer es revisar los hábitos de higiene bucal y realizar ciertos cambios en su vida. Por ejemplo, cepillarse los dientes y la lengua después de cada comida, beber mucha agua o usar el hilo dental. Si después de efectuar estas modificaciones, no se consiguen resultados, lo mejor es consultar a un especialista.

¿Cuáles son las principales causas de la halitosis?

Para combatir la acumulación bacteriana en los dientes, la encía o la lengua, lo mejor es hacer una limpieza dental. Asimismo, ponerse en contacto con un dentista para un tratamiento a fondo es la mejor solución. A continuación, enumeramos algunas de las posibles causas que generan la halitosis:

  • Alimentos. La descomposición de los alimentos crea este olor desagradable. Incluso, hay productos que producen mal olor, como las cebollas, los ajos o especias.
  • Higiene bucal. Si la persona no lleva una buena higiene bucal, lo más normal es que se produzca el mal aliento. Incluso, la lengua es una fuente de bacterias, por lo tanto, un buen cepillado dental y lingual es clave.
  • Boca reseca. Tener la boca reseca también puede generar mal olor, por este motivo, es bueno beber agua con frecuencia.
  • Tabaco. Fumar provoca un olor bastante desagradable en la boca. Los fumadores son personas más propensas a la halitosis.
  • Medicamentos. Hay ciertos medicamentos, que por su composición, pueden liberar sustancias químicas que favorecen el mal aliento.
  • Infecciones en la boca. Por último, hay ciertas infecciones en la cavidad bucal, como las llagas o enfermedades en las encías, que también provocan dolores desagradables.

Tal como observamos, las causas de la halitosis y su tratamiento se relacionan, por este motivo, es bueno conocer el origen real. Solo, de esta manera, podremos acabar con esta enfermedad y conseguir resultados más duraderos. 

Tratamientos para evitar la halitosis

Además de la higiene bucal como una obligación diaria para mejorar el aliento bucal, hay otra serie de métodos efectivos para lograrlo. El objetivo es acabar con este olor desagradable e incómodo para la persona que lo sufre. Si bien es cierto, que las pastillas de menta o los sprays, se han convertido en soluciones efectivas a corto plazo, vamos a ofrecerte otras opciones.

  • Dieta saludable. Es conveniente incluir una dieta baja en grasa y rica en futas y verduras. Este tipo de productos ayudan a prevenir estos problemas bucales.
  • Hidratación. Generar saliva es muy conveniente para evitar que la cavidad bucal se reseque. Esto se resuelve bebiendo mucha agua, en su defecto, usar goma de mascar sin azúcar para generar saliva.
  • Enjuagues bucales. Esta solución es una buena opción para prevenir y resolver la halitosis, sobre todo, si el enjuague es fluorado.
  • Cloruro de zinc. Este tratamiento es más agresivo, por lo que es recomendable consultar a un dentista para ver si es la mejor opción, puesto que es un compuesto con actividad antimicrobiana.
  • Clorhexidina. Igualmente, esta alternativa es aconsejable por su actividad bacteriostática, que inhibe el crecimiento de bacterias.
  • Dióxido de cloro. Por último, si se prueba el dióxido de cloro, en un 0,1%, podemos obtener buenos resultados Es una buena elección por su capacidad para oxidar los compuestos con azufre.

En resumen, este tipo de temas se tratan en el Grado Superior en Higiene Bucodental a distancia. Si te interesa titularte en esta materia, no dudes en acceder al temario por completo del ciclo. En caso de dudas, ponte en contacto con nosotros para ofrecerte más información sobre este plan de estudios y las salidas laborales.

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